Segundas partes fueron buenas

L'avenue des Alliers et plus loin l'Hôtel de ville (Leuven-Belgium)

Por mucho que dijera Cervantes, segunda partes fueron esta vez buenas. De lo primero que me doy cuenta es que este inicio de curso no se parece en nada al de el año pasado. El año pasado apenas hablaba neerlandés , no conocía a casi nadie, estaba un poco harto de que me marearan en la universidad, tenía bastante poca idea de lo que haría ese año aparte de aprende el idioma y Lovaina era para mi algo a descubrir.
Lo que me ha sorprendido/interesado/hecho pensar este principio de curso ha sido:

1.

Una vez que conoces su idioma y sabes como funciona el asunto, la burocracia flamenca te trata de maravilla. Son eficientes, amables y dispuestos a resolver cualquier problema. Hoy estaba rellenando mi ISP, programa endiablado de la KUL que sirve para elegir las asignaturas,y no conseguía enviarlo al responsable. Cada vez que lo intentaba recibía un mensaje de error. Por culpa de mi líos con las asignaturas, el año pasado ya hice un tercio de primer curso, el programa no me dejaba enviarlo. Fui a la secretaría de Derecho para pedir ayuda, la chica que trabaja allí debe estar cansándome de mí. Le expliqué el problema. Ella le fue a dar al botón de enviar que yo había presionado 30 veces. Le advertí: no creo que funcione, pero funcionó. Le pregunté: ¿cómo lo ha hecho?, ella me respondió: ¿qué te creías, qué nosotros íbamos a tener el mismo poder que un estudiante? Me reí con ganas y ella también se empezó a reír. Problema solucionado.